Ir al contenido principal

¿Quién se hará cargo del hospital de ranas? / Lorrie Moore

 


Narrado en primera persona, la protagonista nos va contando su infancia y juventud. Sobretodo su relación con una amiga. El trabajo en un parque de diversiones, sus primeros amores, la relación con padres casi ausentes.
Lo màs interesante es que inicia contando desde adulta a su esposo y va cambiando de tiempos sin avisar. Eso requiere un trabajo para el lector que he aprecidado muchisimo.
Me acerqué a esta escritora por recomendaciòn de Leila Guerriero y como siempre acertó.
Lectura muy disfrutable. Buena descripción de personajes y ambientes.
Una cosa, no menor, es que esta edición fue traducida por Inés Garland, una escritora que me gusta mucho y que disfruté con Piedra papel o tijera.




El eje de ¿Quién se hará cargo del hospital de ranas?, novela breve de Lorrie Moore, es la historia de la amistad entre dos chicas adolescentes de un pueblo del noreste de Estados Unidos. Una de ellas, Berie Carr, curadora de historia, evoca aquel tiempo —en el que definió su identidad— veinte años después, con la nostalgia y el desencanto que provoca la cercanía de los cuarenta.

Durante un viaje a París, en el que acompaña a su marido a un congreso, pide reiteradamente, en el restorán, un plato con sesos, para conducir su memoria hacia aquella amistad de infancia y adolescencia de una manera proustiana, y mientras recuerda, comienza a admitir que a su matrimonio sólo lo sostiene la simulación, quizá como espejo de Storylandel parque temático que recrea libros de cuentos infantiles en el que ella y su amiga trabajaban; una fantasía idílica y tan mentirosa como casarse, comer perdices y ser felices, a su vez reflejo de los Estados Unidos de América, cuyos sueños de gloria se realizan en el camino de una historia y una tradición de las que no conviene apartarse. A la salida del parque hay una tienda de souvenirs, el último eslabón mercantil de la cadena de apariencias, metáfora de un país fundado en la grandeza de lo artificial.

Publicada en 1994, durante la época del capitalismo exacerbado, el tono de esta nouvelle –impregnado del humor mordaz que es marca registrada de Moore, con sus expresiones irónicas y comentarios afilados– es melancólico, y se hace eco del estado de ánimo pesimista de quien redescubre o reinventa el pasado cuando ya ha vivido en carne propia que los sapos no se transforman en príncipes. Todo lo contrario: lucen tan magullados por los besos recibidos que no podrían salvarlos princesas, ni santas, ni enfermeras. A la vez, alude metaficcionalmente a la manera en que está construida la novela: el “sendero de los recuerdos” era el lugar del parque temático donde las amigas hacían su descanso durante el almuerzo. Y, por otro lado, si acaso hubiera un exceso de referencias a las ranas del título, Moore (quien participará del Filba en septiembre) le da a la cuestión también un giro feminista: a cierta edad, una mujer no besaría a un sapo para que se convierta en príncipe, lo haría porque le resulta más interesante un sapo que habla que un príncipe.

El gran placer de este libro reside en la voz narradora de Berie, ágil e inteligente, una especie de naturaleza anfibia, que se siente exiliada tanto de su hogar cristiano como del parque temático. Ambos prometen finales felices pero falsos: el parque tapa velozmente con una suculenta indemnización el accidente que le cuesta las piernas a un niño, y el matrimonio vacío de Berie —en el que rige la decisión de no tener hijos propios porque ambos portan un gen defectuoso— sólo se colma con las infidelidades de su marido.

Sin lugar a duda, es posible experimentar ese placer en castellano gracias a la eficaz traducción de Inés Garland.

 

Lorrie Moore, ¿Quién se hará cargo del hospital de ranas?, traducción de Inés Garland, Eterna Cadencia, 2019, 176 págs.

 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Para encontrar un tigre : la aventura de leer / Gustavo Roldán

Estuve en Còrdoba. Fuimos con Débora al encuentro anual de CEDILIJ. Tuvimos la suerte, la honra, la dicha, la felicidad, de ser recibidas en la casa de Rubén López. Desde la llegada nos instalamos en lo que Dvetach definió como estado de poesía. Hay gente muy especial, solidaria, sencilla, talentosa, generosa, Rubén es eso y más y hemos sido bendecidas con su amistad. Así que disfrutamos montones, aprendimos muchisimo. El estaba preparando el taller que dictó en la jornada, sobre lectura en voz alta enfocada en los textos de Gustavo Roldán. Así que tenía muchos libros del autor a mano. Uno era precisamente Para encontrar un tigre: la aventura de leer. Así que lo fui leyendo intercalado con Cacería de Andruetto y uno de Carlos Fuentes. Lo terminé en una mañana. Confieso que ya lo habia leido, pero estas cosas se deben releer. No encontré nada muy diferente a lo que vengo elaborando pero es un buen libro, sintetico y condensado con lo que es la aventura de leer. Por eso agrade

Nada es verdad / Veronica Raimo

  Premio Strega Giovani 2022 Veronica pasa su infancia y adolescencia en un barrio de Roma junto con su excéntrica familia: una madre omnipresente que vive permanentemente angustiada, un padre lleno de estrafalarias obsesiones y un hermano mayor, casi perfecto, que es el centro de toda la atención. Día a día tendrá que sortear situaciones tan embarazosas como desternillantes y descubrirá la impostura como forma de mantenerse cuerda y lidiar con la vida que le ha tocado en suerte. En esta divertidísima novela, ganadora del Premio Strega Giovani y que ha causado sensación en Italia, Raimo nos ofrece una precisa radiografía de esa energía paralizante que puede llegar a ser la familia y de la empresa siempre incierta que es convertirse en mujer. Nada es verdad  es un extraordinario retrato generacional, feroz e irreverente, sobre vínculos, pérdidas, desastres familiares y la aventura de crecer; una novela que rebosa inteligencia y que nos recuerda el valor siempre terapéutico de la comedia

El hijo olvidado / Mikel Santiago

  Hay personas a las que dejamos atrás, hay deudas que nunca terminamos de pagar. Aitor Orizaola, «Ori», es un agente de la Ertzaintza en horas bajas. Mientras se recupera en su casa de la violenta resolución de su último caso –y se enfrenta a un expediente disciplinario– recibe una mala noticia. Su sobrino Denis, que años atrás fue casi un hijo para él, ha sido acusado de asesinato. Pero algo huele a podrido, y Ori, incluso de baja y dolorido, tiene algunos trucos de perro viejo para averiguar qué está pasando realmente.