LEER PARA VIVIR

 Una maestra se muda y decide sumar a su vida un perro. Tiene al Ujier, un gato gordo, burgués y señorial. Visita un refugio y no logra decidirse por ningún animal para acompañar su vida. Hasta que conoce una perrita, fea, enferma pero con la que el amor es a primera vista. Se adoptan y se nombran: perrita country. Al principio, la convivencia con el Ujier es casi de tinte diplomático, luego se van adaptando y conviven armoniosamente. Pero a esto se suma un gorrión.  Es una novela muy divertida, donde las observaciones sobre los animales que conviven con nosotros son verdaderamente deliciosas. En mi caso que convivo con dos perros y dos gatos, vi muchas actitudes similares Una convivencia que es ancestral, sigue siendo un misterio en muchos aspectos, pero nunca renunciaría a mis compañeros de cuatro patas. Este libro es además ilustrado, de tal forma que funciona a veces, como libro álbum o novela gráfica. De Sara Mesa había leido Cara de pan. Es una escritora a tener en cuenta, hasta

  Una niña falta a clases y nadie parece saberlo. Un hombre que ama las aves y que no sabe o no puede comunicarse con otras personas. Se encuentran en un parque. A diario y no sabemos mucho de sus vidas. Él y ella tienen algo en común, la sociedad es cruel con ellos. La niña tiene como apelativo: cara de pan, para burlarse de ella.  El señor ama las aves, sabe muchisimo de pájaros- Sabe de especies, hábitos y ama mucho a Nina Simone. Todo lo que conoce lo comparte con la niña. Todo el tiempo hay una tensión por no saber qué va a suceder. Sospechamos que el señor va a abusar de la niña, cosa que muestra nuestra visión terrible de la vida, de las personas. Pero es posible una amistad así, donde el encuentro con el otro sin más interés que su vida misma. Estar dispuesto a comunicarnos con otro que no nos va a dar nada, sólo encuentro, compañía conocimiento. Es una novela interesante, intensa, plena de imágenes bellas.  Una lectura que me llevó a un cuento de Shweblin: un hombre de suerte