Debo confesarlo: lo leì desde mi celular. Es que no lo conseguí de otra forma y me resultaba urgente su lectura.
Camilo cuenta su historia, su vida con la abuela Bucha, su tío Hugo y Rogelio.
Hijo de una desaparecida y un padre muerto en una cárcel en el sur en años de dictadura.
Camilo está enojado con su abuela, que le oculta cosas. La abuela está enojada con su hija a quien ama pero no entiende por qué le pasó lo que le pasó. Lo mismo que nos pasa a nosotros no entendemos, podemos vivir con esta angustia? No no podemos, es una herida enorme, pero Camilo vive y su abuela lo ama y el tìo Hugo lo cuida y Rogelio que estuvo en prisiòn con Jorge el padre de Camilo, también intenta reconstruir su vida.
Pero llega el amor: Carolina, eso cambia mucha cosa, remueve sentimientos, ayuda a Camilo a vivir y no sólo a sobrevivir.
Cada capítulo inicia con algun pasaje de poema o canción.
Está escrito de manera hermosa. Es muy poética Gracialita al escribir. tiene imágenes como: "se le acalambraron los ojos y no podía leer".
La ofrenda que hace Carolina en el cementerio, coronas de flores y nombres que los unen, que son memoria.
Graciela hace que ese sapo que tenemos atragantado nos bese y nos permita ver la verdad de una manera cordial, sin golpes bajos.
Esos sapos no llegarán a principes pero seguro que no los olvidaremos como la canción de cuna que cantaba Ana a Camilo antes de dejarlo escondido en un cesto de ropa y salvarlo para que hoy no sea uno de los nietos desaparecidos o quizá ya recuperados.
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